Khushboo, como su madre antes que ella, fue obligada a casarse precozmente. Su padre murió cuando era muy pequeña, dejando a su familia con pocos medios. No pasó mucho tiempo antes de que su madre y la comunidad la presionaran para que se casara con el fin de ayudar a su familia. “Yo era muy joven, no podía decir nada… no entendía”, explica.
Poco después de casarse, Khushboo abandonó la escuela y, sin acceso a la planificación familiar, pronto quedó embarazada. Durante el parto, surgieron complicaciones y aunque los médicos intentaron salvar a madre e hijo, éste murió y ella cayó en una profunda depresión.
A pesar de su terrible experiencia, ahora Khushboo trabaja como educadora de jóvenes. Con sus compañeras, organiza reuniones e informa a los aldeanos de los efectos negativos de los matrimonios precoces. Incluso ha impedido que se celebraran varios matrimonios infantiles.
Ver que su hermana perdía su bebé, también cambió profundamente a Priyanka: “La experiencia de mi hermana me ha enseñado que no debo ni siquiera pensar en casarme hasta que haya terminado mis estudios y pueda valerme por mí misma. Y espero que no sólo yo, sino que todas las chicas esperen a ser independientes antes de casarse”.
Fuente: girlsnotbrides.org