Estos días de vacaciones, los niños de Yashodhara están asistiendo todas las mañanas a un taller de manualidades que se ofrece en un Centro del mismo Campus donde se encuentra el Hogar. En este Centro se enseñan oficios a mujeres ciegas para que puedan valerse por sí mismas. Las invidentes, que aprenden a fabricar bolsos, cestas, y diferentes objetos con fibra plástica, han tenido la iniciativa de diseñar talleres especiales para los niños de Yashodhara.
Lo primero que los niños y niñas están aprendiendo a tejer son alfombras individuales para sentarse en el suelo. En su confección utilizan retales de ropa de colores, trozos de tela que sobran en los talleres de costura. Tienen colores muy vivos, y los niños son muy creativos a la hora de combinar colores. El próximo paso será trabajar con plástico. Como este material no es tan flexible, los niños tendrán que poner más empeño en sus creaciones, que serán bolsos para llevar el almuerzo al colegio.
Es asombroso ver el entusiasmo con que los niños dan la bienvenida a cualquier actividad que se les proponga, y cómo se entregan al aprendizaje sin reservas. Una actitud como ésta, abierta e inquisitiva, unida a las aptitudes que van adquiriendo, son y serán sin duda inapreciables en su caminar.
Continuemos de la mano con ellos.
Eshana. Voluntaria residente en el Hogar Yashodhara.