viernes, 21 de diciembre de 2012

DÍA INTERNACIONAL DEL TRABAJADOR MIGRANTE



El Día Internacional del Trabajador Migrante se celebra el 18 de diciembre. Fue establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en el año 2000, teniendo en cuenta el número elevado y creciente de trabajadores migrantes en el mundo.

Se considera, en primer lugar, como una oportunidad para reconocer la contribución de millones de trabajadores itinerantes a las economías de sus países de acogida u origen, y en segundo lugar, para promover el respeto de sus derechos humanos básicos. Se observa en muchos países a través de la difusión de información sobre los derechos humanos y las libertades políticas fundamentales de los migrantes, y mediante el intercambio de experiencias y el diseño de iniciativas para garantizar su protección.

En India, hay 309 millones de personas que se desplazan constantemente en busca de fuentes de trabajo y sustento. A pesar de representar el 30% de la población total del país, los trabajadores migrantes se encuentran excluidos de la vida económica, cultural, social y política, y a menudo son tratados como ciudadanos de segunda clase.

Las limitaciones que enfrentan estos trabajadores son muchas: falta de representación política, viviendas inadecuadas, salarios bajos, trabajo inseguro o peligroso, acceso limitado a servicios de sanidad y educación, y discriminación. Desprovistos de identificación legal y de residencia, no pueden reclamar derechos de protección social y se les excluye de los programas gubernamentales.

Los niños son el grupo más vulnerable y no reconocido de entre las poblaciones migrantes. Los niños migran de forma independiente o acompañando a sus familias. A menudo pierden el acceso a derechos básicos, no asisten al colegio, sufren riesgos de salud y seguridad, y se ven privados de aportes críticos necesarios para su desarrollo físico, psicológico y emocional, lo que tiene un impacto devastador en su desarrollo global.

El derecho a la educación (dentro del marco del Derecho a la Ley de Educación) de los niños itinerantes se ve amenazado constantemente pues sus frecuentes desplazamientos impiden una continuidad en su formación académica. Además, se ven abocados a formar parte de la fuerza laboral a una edad muy temprana. Los salarios a los que pueden aspirar son ínfimos o inexistentes, ya que aunque trabajan largas horas, lo hacen como empleados no registrados e invisibles.

En Pune, ciudad donde Asha-Kiran desarrolla su labor, existe gran cantidad de proyectos de construcción que atraen a trabajadores migrantes. Una vez contratados, éstos levantan sus chabolas dentro de los mismos los sitios de construcción, pero dado que el padre y la madre trabajan, sus hijos se ven desprovistos de atención durante la jornada de trabajo. 

Con el fin de proporcionarles los cuidados que necesitan, y contrarrestar, a la vez, los muchos obstáculos que afrontan en su desarrollo, Asha-Kiran establece lazos de cooperación con empresas constructoras. Las empresas proporcionan el espacio físico donde los niños puedan estar protegidos durante el día, y Asha-Kiran proporciona las profesoras, formación, cuidados médicos y dentales, alimentación, y actividades apropiadas a su edad. De esta manera, nuestro proyecto Centros de Día para la Infancia Itinerante da respuesta a algunas de sus múltiples problemáticas y labora por propiciar mejores condiciones presentes y futuras para ellos.


Fuentes: wikipedia.org
             unicef.org