Como parte del programa de Salud que implementamos en
Asha-Kiran, cada vez que inauguramos un Centro de Día, realizamos una evaluación general de salud a todos los niños y niñas que asistirán regularmente al Centro. La inauguración de Hadapsar no fue la excepción.
Antes de abrir las puertas del Centro, ya habíamos llevado a cabo un diagnóstico de salud en el poblado y habíamos detectado una fuerte incidencia de malnutrición y anemia entre los niños del lugar y serios problemas dermatológicos provocados por los baños que los niños suelen darse en los canales altamente contaminados de la zona. Descubrimos, además, que los menores no habían sido vacunados contra enfermedades comunes. Con este reto por delante, nos pusimos manos a la obra inmediatamente. Antes de fines de Octubre, todos los niños contaban ya con una ficha de salud, que nos permitirá llevar a cabo un seguimiento personalizado de cada niño. La parte más problemática de la actividad fue la vacunación contra el tétano. Los niños de la zona marginal no están acostumbrados a recibir inyecciones y este tipo de vacuna los asustó mucho.
Afortunadamente, los padres de familia, el personal del policlínico y las profesoras y asistentes sociales de Asha-Kiran supieron explicarles pacientemente a los niños la importancia de la vacuna y los animaron a ser valientes para recibir la inyección. En las zonas marginales de Pune, el tétano es una enfermedad bastante común, puesto que los niños suelen jugar descalzos en zonas plagadas de objetos punzantes de metal, que pueden ocasionar heridas muy serias. Al final de la jornada, 32 niños y niñas habían sido cuidadosamente examinados y vacunados. Este es sólo el comienzo.